A veces, ser padre puede ser abrumador y puede llevar al agotamiento si no se toman medidas para desarrollar habilidades, apoyar la resiliencia y aliviar los síntomas. Un enfoque en la resiliencia compasiva mejora nuestra capacidad para empatizar con el sufrimiento de nuestro hijo, apoya nuestra habilidad para criar de acuerdo con nuestros valores y objetivos, y construye nuestra propia satisfacción en la vida. Los niños también pueden beneficiarse de una crianza consciente y compasiva al aprender cómo manejar desafíos y actuar con compasión a través de nuestro modelado.
Al participar como parte de un grupo, este contenido fomenta la toma de riesgos y la exploración de nuevas ideas que contribuyen a la capacidad de nuestra familia para prosperar.